Preguntas comunes de los padres sobre el cannabis para menores

Para muchos, el concepto de “marihuana medicinal” sigue siendo extraño. Aplicar este concepto a los niños es aún más extraño para muchos, ya que muchos se resisten a la idea de dar cannabis a un niño. Sin embargo, si se tiene en cuenta el hecho de que prescribimos medicamentos adictivos como los opioides y los sedantes a los niños que sufren afecciones graves como el cáncer o la epilepsia, empieza a tener sentido poder recomendar el cannabis medicinal. Después de todo, si el cannabis hace el mismo trabajo que una sustancia más dañina pero con menos efectos secundarios, entonces ¿por qué no utilizarlo?

He aquí algunas de las preguntas más comunes que tienen los padres sobre el cannabis medicinal para menores.

¿Afectará el cannabis al cerebro de mi hijo?

No hay duda de que el cannabis puede afectar a los cerebros en crecimiento. El tetrahidrocannabinol (THC), en particular, puede tener efectos graves en la estructura del cerebro, ya que los cerebros de los niños y adolescentes están en construcción, y el sistema endocannabinoide (SEC) desempeña un papel crucial en este desarrollo. Añadir más cannabinoides a este proceso puede perturbar el desarrollo del cerebro y causar potencialmente problemas como la desregulación emocional, problemas de memoria y una reducción de la materia blanca.

Sin embargo, muchos de estos problemas se asocian al uso no médico, en el que se tiene menos en cuenta la dosis adecuada. Las variedades muy potentes y ricas en THC también son más propensas a ser utilizadas en estos contextos. Las personas que padecen afecciones graves que pueden deberse a una deficiencia de endocannabinoides (es decir, cuando el cuerpo no está produciendo suficientes cannabinoides propios de origen natural) pueden necesitar realmente el THC. Algunos tipos de cáncer y el autismo son ejemplos de afecciones en menores donde el cannabis puede ser beneficioso.

Además, hay muchos compuestos en el cannabis que son útiles desde el punto de vista médico y no son intoxicantes. El cannabidiol (CBD) es un ejemplo popular, pero hay otros como el cannabicromeno (CBC) y el cannabigerol (CBG) que también tienen propiedades antiinflamatorias, para combatir las náuseas y para calmar la ansiedad. Estos cannabinoides también pueden usarse para domar los efectos psicoactivos del THC hasta cierto punto, lo que permite utilizar dosis más bajas (pero aún eficaces) de THC.

Para más información sobre el cannabis y el desarrollo del cerebro, consulte nuestro artículo aquí.

¿Afecta el CBD de alguna manera a mi hijo?

El CBD no intoxica de la misma manera que el THC y no tiene una fuerte afinidad con los receptores CB1 del cerebro. Esto significa que los efectos psicoactivos del CBD se sienten más debido a sus interacciones con los receptores de serotonina, dopamina, opioides y otros en el cuerpo, así como a la elevación del estado de ánimo al ayudar a aumentar la cantidad de anandamida disponible en el cuerpo. Es técnicamente incorrecto llamar al CBD “no psicoactivo”, pero ciertamente no es psicoactivo de la misma manera que el THC. De hecho, el CBD puede reducir algunos de los efectos sedantes y negativos del THC sobre la memoria.

Esto ha llevado a muchos a creer que el CBD es en general bastante seguro para los niños. Y, debido a sus efectos relativamente tolerables, hay algunas buenas razones para creerlo. Sin embargo, hay que señalar que no ha habido ningún estudio a largo plazo que analice los efectos del CBD en los niños.

Sí sabemos que existen algunos problemas relacionados con la toma de demasiado CBD y el daño hepático. También sabemos que, con una dosis cuidadosa, el CBD es de inmensa utilidad para los niños que padecen epilepsia o cáncer. Sin embargo, como el estudio de los cannabinoides es todavía una ciencia relativamente joven, es difícil decir con seguridad cuáles son sus efectos a largo plazo.

También hay que decir que el uso a largo plazo de sedantes y analgésicos también tiene efectos negativos (quizá más que los cannabinoides), por lo que, una vez más, no debemos tratar el cannabis de forma diferente en este sentido.

¿Interfiere el cannabis con otros medicamentos?

Los cannabinoides, y el CBD en particular, pueden desensibilizar las enzimas hepáticas. Esto significa que los cannabinoides pueden interferir con la capacidad del cuerpo para metabolizar ciertos tipos de medicamentos. Los efectos sedantes del THC también pueden interactuar con los analgésicos. Los principales tipos de medicamentos con los que interfieren los cannabinoides son:

• Opiáceos (por ejemplo, tramadol, hidrocodona)
• Benzodiazepinas (por ejemplo, lorazepam, clonazepam, alprazolam/Xanax)
• Algunos tipos de medicamentos para la fiebre del heno o la alergia, como el Benadryl (difenhidramina) y la cetirizina (Zyrtec)
• Antidepresivos, en particular la duloxetina (Cymbalta)
• Anticoagulantes, como la warfarina y la aspirina

Para más información sobre los medicamentos con los que pueden interferir los cannabinoides, consulte nuestro artículo aquí.

¿Cuál es la dosis adecuada de cannabis para un niño?

Esto es difícil de decir con seguridad, ya que hay pocos estudios disponibles que analicen las dosis apropiadas de cannabis y cannabinoides para los niños. Consulte el artículo “Consideraciones sobre la dosis pediátrica del cannabis medicinal” para obtener información más precisa y detallada. Nuestro artículo sobre la dosificación adecuada también le ayudará a cubrir lo esencial. Los principales aspectos que deberá tener en cuenta a la hora de dosificar los cannabinoides para un niño son:

• La edad del niño.
• El problema de salud que padece el niño. Algunas afecciones pueden requerir proporciones específicas de cannabinoides en dosis concretas (por ejemplo, ricos en CBD para las convulsiones y las afecciones neurológicas, ricos en THC para las náuseas y el dolor crónico).
• El método de ingestión. Para la mayoría, las tinturas son el método ideal de ingestión cuando se trata de niños, pero puede ser necesario otro método (por ejemplo, supositorios para cánceres de intestino y estómago).
• La hora del día en que se consumen los cannabinoides: es posible que quiera evitar los efectos sedantes del THC durante el día, por ejemplo.
• Acérquese a la planta de cannabis como un todo, y conozca todos los diferentes cannabinoides, incluidos el THCV, el CBG, el CBC y el CBN, así como los terpenos.
• La microdosificación es especialmente importante cuando se trata de niños.
• Diferentes personas tienen diferentes cantidades del cannabinoide natural anandamida en sus cerebros, lo que puede determinar la cantidad de THC que una persona puede tolerar. Las diferencias genéticas pueden afectar al modo en que se metabolizan determinadas drogas.
• Las otras afecciones que padece la persona. Una persona que sufre tanto de Tourette como de TDAH puede tener requisitos diferentes a los de quienes sólo tienen TDAH.

Marihuana medicinal para menores: En general

Así pues, el principal consejo que podemos dar en lo que respecta al cannabis es el siguiente: trátelo como lo haría con cualquier otro medicamento. Esto significa que el cannabis puede ser útil para algunas afecciones, perjudicial para otras, o ser neutro y no tener ningún efecto médico positivo o negativo importante. La dosis también es importante, y algunas personas pueden necesitar proporciones específicas en determinados momentos del día para sacar el máximo provecho de sus medicamentos.