¿La hierba reduce el deseo sexual?

La ciencia es escasa en cuanto al impacto positivo o negativo de la marihuana en el deseo sexual, por lo que es difícil afirmar que el cannabis afectará negativamente a su vida sexual. Muchas pruebas anecdóticas sugieren que la marihuana puede hacer que el sexo sea más satisfactorio y aumentar el deseo sexual de las mujeres, aunque supuestamente puede causar disfunción eréctil en los hombres.

En realidad, el hecho de que la hierba disminuya el deseo sexual tiene probablemente una respuesta mucho más complicada que la que abordan las anécdotas actuales. Este artículo examina la investigación existente para explorar lo que sabemos actualmente y lo que aún debemos estudiar sobre el impacto del consumo de marihuana en el sexo y el impulso sexual.

Cómo afecta el cannabis al deseo sexual

En primer lugar, debido al estatus del cannabis como sustancia controlada de la Lista I, los investigadores se han enfrentado a dificultades para estudiar su efecto sobre el deseo sexual. Por ello, la mayoría de las investigaciones disponibles proceden de las respuestas de los participantes a una encuesta, en lugar de las pruebas clínicas de un experimento de laboratorio controlado. Las encuestas autodeclaradas están intrínsecamente sesgadas, y no hay forma de corroborar las respuestas con las experiencias reales.

El fenómeno de la excitación sexual también es complejo: los factores biológicos, sociales, ambientales y psicológicos desempeñan su papel en las diferentes etapas del sexo. Lo que constituye una buena vida sexual es diferente para cada persona y puede cambiar según el estado de ánimo y las circunstancias.

El cannabis interactúa con el sistema endocannabinoide del cuerpo, que desempeña un papel en varias áreas del cerebro que se ocupan de la función sexual. Un estudio reciente descubrió que la masturbación hasta el orgasmo provocaba un aumento del cannabinoide 2-AG en las muestras de sangre, lo que sugiere que el SEC desempeña un papel en la actividad sexual. El cannabis también aumenta el flujo sanguíneo, esencial en la excitación fisiológica, y aumenta la sensibilidad de los receptores nerviosos de la piel, contribuyendo a mejorar las experiencias sensoriales.

Desde el punto de vista subjetivo, un estudio realizado por participantes descubrió que el consumo de cannabis antes de la actividad sexual ayudaba a los individuos a relajarse, aumentaba la sensibilidad al tacto y la intensidad de las emociones. Otro estudio descubrió que los consumidores que declararon haber consumido cannabis con regularidad tenían encuentros sexuales ligeramente más frecuentes que los que no lo consumían.

Las mujeres, en particular, informaron de una probabilidad dos veces mayor de alcanzar un orgasmo satisfactorio cuando consumían cannabis antes del sexo que las que no lo hacían, al igual que las mujeres que declararon consumir cannabis con frecuencia. Sin embargo, el cannabis tiene el potencial de secar la mucosa, lo que podría obligar a algunas mujeres a utilizar un lubricante personal.

Para los hombres, el cannabis podría tener potenciales efectos secundarios adversos en la salud sexual. Algunos estudios descubrieron que los efectos a largo plazo del consumo de cannabis pueden incluir una disminución del placer sexual y llevar a un desinterés por disfrutar de la intimidad con la pareja.

El cannabis también puede tener un impacto en la disfunción eréctil y también interactúa negativamente con el Viagra. Un estudio descubrió que el cannabis puede reducir el recuento de esperma en los hombres en dosis altas, aunque otro estudio reciente descubrió que el consumo moderado puede llevar a un mayor recuento de esperma.

Un estudio en animales también demostró que el aumento de la estimulación del receptor CB1 – sobre el que actúan el THC y el CBD – retrasa el tiempo de eyaculación, inhibiendo la capacidad de los hombres para alcanzar el orgasmo. Otro estudio con participantes apoya estos hallazgos, en los que se creía que la distorsión de la percepción del tiempo por parte del cannabis era la culpable.

Sin embargo, los estudios en animales no siempre se trasladan a los humanos. Una revisión bibliográfica sobre el cannabis y la función sexual descubrió que tanto los hombres como las mujeres informan de un aumento del disfrute sexual, de la intensidad del orgasmo, de la sensibilidad corporal y de un crecimiento o ningún cambio en el deseo sexual. Los autores también señalan que las mujeres eran más propensas que los hombres a informar de una disfunción sexual tras el consumo de cannabis.

Uso del cannabis para mejorar el deseo sexual

Dosis

Cuando considere añadir cannabis para estimular su deseo y disfrute sexual, la dosis es un componente crítico a tener en cuenta. Debe conocer su tolerancia antes de incorporar a su pareja a la experiencia sexual impulsada por el cannabis para comprender mejor su impacto en sus niveles de excitación antes de añadir otras variables.

Empiece con dosis más bajas y aumente gradualmente a medida que vaya probando para ver qué es lo que mejor funciona con su sistema. Las dosis demasiado altas pueden inducir náuseas o ansiedad/paranoia, y ambas disminuyen el disfrute de la experiencia sexual y reducen el deseo sexual.

Métodos de consumo

Hay varios métodos de consumo que se prestan a las experiencias sexuales, algunos mejores que otros. Los tópicos y las lociones o aceites con infusión de cannabis pueden ser un complemento divertido para el juego en la cama, aunque los tópicos tienen menos probabilidades de producir efectos psicoactivos que las sensaciones localizadas.

Fumar o vaporizar flores o aceites de cannabis producirá una euforia de acción mucho más rápida, con efectos que duran hasta dos horas. Para sesiones más largas, los comestibles tienen un inicio lento pero producen resultados más duraderos.

Cepas

Los informes anecdóticos recomiendan elegir cepas con niveles más altos del terpeno limoneno para ayudar a aumentar el impulso sexual. Las cepas con predominio de índica que producen una euforia más física y calmante también pueden potenciar el disfrute sexual y reducir la inhibición. Las cepas (cultivares) de las que se ha informado que aumentan el deseo sexual incluyen Blue Dream, Atomic Northern Lights, Strawberry Kush, Blueberry y Jillybean.

Para aquellos que buscan cepas para aliviar el dolor durante el sexo, las opciones con niveles más altos de beta-cariofileno, humuleno o mirceno pueden ayudar a eliminar las molestias que impedirían el disfrute sexual. Una variedad de cannabis rica en pineno y linalol puede ser ideal para quienes buscan aliviar la ansiedad. Los que buscan reducir la fatiga pueden preferir algo con más limoneno.

En general, no parece haber una cepa de cannabis en particular que pueda aumentar el deseo sexual – todo depende de las preferencias personales.

Lo esencial: cómo afecta el consumo de marihuana a la libido

A pesar de la escasez de investigaciones, en las estanterías de los dispensarios hay docenas de productos de cannabis que afirman mejorar la experiencia sexual o ayudar con los problemas de libido. El sexo es una experiencia muy individualizada, en la que intervienen muchos factores en sus distintas fases y en las de su pareja.

Si vive en un estado en el que se ha legalizado la venta de marihuana, no le vendrá mal experimentar y ver cómo afecta a su deseo sexual. Empiece con dosis más pequeñas, experimente con diferentes métodos de consumo y comunique abiertamente a su pareja lo que funciona o no.

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