3 formas de usar el cannabis para controlar el estrés
Artículo escrito por
Diana FolletteDirectora de Éxito del Paciente
Índice
- La microdosificación podría ser la clave
- Datos importantes sobre los terpenos
- Cómo averiguar la dosis y el método de ingestión adecuados para ti
Con medio mundo cerrado y la gente encerrada en casa sin poder salir (si es que lo hace), no es de extrañar que la gente busque formas alternativas de entretenerse. La gente también necesita una forma de relajarse y dejar de pensar en un virus que, si no se controla, podría matar a miles, si no a cientos de miles de personas. Esto genera mucha angustia y aún más para aquellos que sufren problemas de salud graves.
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Cuando las personas están estresadas, producen más cantidad de la hormona llamada cortisol. Cuando el cuerpo humano se cura, la inflamación se convierte en una respuesta al estrés. A corto plazo, el estrés y la inflamación podrían incluso ser útiles. Sin embargo, el estrés y la inflamación a largo plazo descomponen los tejidos y deterioran el sistema inmunitario. Entre el 75% y el 90% de las enfermedades humanas están relacionadas con la activación del sistema de estrés del organismo. En medio de un brote viral, un sistema inmunológico deteriorado no es lo ideal. Aquí encontrarás información sobre cómo puedes utilizar el cannabis para vencer el estrés y la ansiedad y mantener la homeostasis que el estrés interrumpe.
La microdosificación puede ser la clave
Hay varios estudios que demuestran que el cannabis puede ayudar a vencer el estrés. Sin embargo, las propiedades del cannabis para combatir el estrés y la ansiedad podrían ser más efectivas cuando se administra en microdosis. Debido a los efectos bifásicos de los cannabinoides, compuestos como el THC pueden vencer la ansiedad en dosis bajas y fomentarla en dosis más altas.
El CBD es igualmente efectivo en dosis bajas o moderadas para la ansiedad, pero hay informes de que el CBD puede promover el despertar. Este efecto promotor de la vigilia del CBD puede depender de la fisiología hasta cierto punto, ya que otros informan de que altas dosis de CBD pueden generar insomnio. Además, cabe destacar que, como el CBD no se une directamente a los receptores CB1 o CB2, no lucha contra el estrés de la misma manera que el THC. En cambio, los efectos ansiolíticos del CBD parecen deberse a su capacidad para activar el receptor de serotonina 5HT1A.
En cuanto a los problemas de sueño e insomnio, el CBN, pequeñas dosis de THC, mirceno y linalol pueden ser más útiles que el CBD por sí solo. Para las personas con TEPT, la capacidad del cannabis (y en concreto del THC) de reducir la cantidad de tiempo que se pasa en la fase REM del sueño puede ayudar a prevenir las pesadillas. De hecho, una de las razones por las que el CBD podría ayudar a conciliar el sueño a algunas personas es por la variedad de terpenos presentes: si se trata de linalol, mirceno y humuleno, se esperan más efectos somníferos. Si se trata de limoneno, pineno y beta-cariofileno, entonces, combinado con el CBD, este podría promover el despertar. El THC podría funcionar de forma similar y, debido al agonismo parcial del THC sobre los receptores CB1, podría potenciar los efectos de otros cannabinoides y terpeneoides. Pero esto es más bien una teoría.
Datos importantes sobre los terpenos
Los terpenos pueden afectar al comportamiento de los cannabinoides. Diferentes combinaciones de terpenos en diferentes dosis también pueden determinar el efecto que puede tener una cepa o producto de cannabis en particular. El beta-cariofileno, por ejemplo, tiene propiedades para combatir el estrés. Sin embargo, cuando se combina con cantidades elevadas de THC, THCV, limoneno y pineno (que también tienen propiedades antiestrés), algunas personas tienen una sensación energética.
Aunque la combinación de THC, THCV, beta-cariofileno, limoneno y pineno puede utilizarse para combatir el estrés y la ansiedad, en algunas personas una dosis demasiado alta de esta combinación puede producir una sensación de “nerviosismo”. Este tipo de combinación puede ser más útil para quienes necesitan un estímulo diurno, y quizá sea mejor tomarla en dosis bajas. Las personas que sufren tanto de ansiedad como de depresión también pueden encontrar una utilidad especial en esta combinación de cannabinoides y terpenos.
Cómo determinar la dosis y el método de ingestión adecuados para ti
Cada persona tiene su propio sistema endocannabinoide (SEC), lo que significa que puede reaccionar de forma muy diferente a los mismos conjuntos de cannabinoides y terpenos. Aunque hay algunos patrones en términos de qué cannabinoides y terpenos son útiles para cada condición, esto no es necesariamente cierto para todos.
Los diferentes métodos de ingestión también tienen efectos diferentes, y algunos métodos de ingestión tardan más en hacer efecto. Fumar, vaporizar o inhalar cannabis tiene un efecto inmediato; las tinturas tardan entre 15 minutos y 1 hora en hacer efecto; y los comestibles tardan entre 1 y 2 horas en hacer efecto (y suelen ser más fuertes y duraderos, ya que pasan primero por el hígado y no por los pulmones).
Algunas enfermedades requieren un método de ingestión que tenga un efecto inmediato (por ejemplo, los temblores asociados al Parkinson), mientras que otras enfermedades requieren un método de ingestión más duradero. Mientras que inhalar o vaporizar el cannabis puede ayudar en los ataques de ansiedad repentinos, una tintura puede tener efectos más duraderos. Esto puede hacer que las tinturas sean útiles para condiciones como el insomnio, donde los efectos duraderos pueden ser particularmente útiles para ayudar a dormir. Dale un vistazo a nuestra Guía de dosificación para obtener información más detallada sobre la dosificación del cannabis.
Dosificación del cannabis para el estrés, la ansiedad y la depresión
En cuanto a la inhalación de cannabis para el estrés, la ansiedad y la depresión, un estudio de la Universidad Estatal de Washington (WSU) sugiere que el cannabis puede ser especialmente útil a corto plazo en las siguientes dosis:
“El equipo de investigación de la WSU descubrió que una calada de cannabis con alto contenido de CBD y bajo contenido de THC era óptima para reducir los síntomas de la depresión, dos caladas de cualquier tipo de cannabis eran suficientes para reducir los síntomas de la ansiedad, mientras que 10 o más caladas de cannabis con alto contenido de CBD y alto contenido de THC producían las mayores reducciones del estrés.”
Por supuesto, el problema de medir las dosis por “caladas” significa que no se dan dosis precisas. Además, hay un gran número de tipos de cannabis diferentes, por lo que es cuestionable que “cualquier tipo de cannabis” sea suficiente para reducir los síntomas de la ansiedad. Es posible utilizar el CBD en proporciones iguales a las del THC (es decir, THC:CBD 1:1) para equilibrar los efectos psicoactivos del THC sin perder algunas de sus propiedades terapéuticas. Muchos también recomiendan utilizar tinturas de CBD:THC 3:1, 2:1 y 1:1 en pequeñas dosis (0,1 ml – 0,25 ml) 2-3 veces al día, y ver cuál es la más efectiva para ti, y en qué dosis. En cuanto a los métodos de inhalación, ¡desgraciadamente fumar cannabis no es la forma ideal de consumir un medicamento! Los vaporizadores de alta calidad son una alternativa potencial, pero muchos de los desechables no son necesariamente de la mejor calidad y podrían provocar lesiones pulmonares. Los inhaladores son otra alternativa, y pueden proporcionar dosis más precisas.
Con los cannabinoides, parece que hay un nivel terapéutico concreto en el que es eficaz sin demasiados efectos secundarios. Esto es similar a lo que ocurre con muchos medicamentos, y una de las principales ventajas es que es poco probable que una sobredosis de cannabinoides sea mortal.
También hay que tener en cuenta que lo anterior es para la depresión, a diferencia del trastorno bipolar (a veces denominado “depresión maníaca”). Las personas que sufren de trastorno bipolar deberían evitar el uso excesivo de THC, aunque el CBD pueda tener efectos antipsicóticos beneficiosos.
¿Existe una dosis inicial ideal?
Esto depende en gran medida de la enfermedad. A los que se les prescribe THC sintético, como el dronabinol (Marinol), se les suele dar una dosis inicial de 2,5 mg dos veces al día (es decir, 5 mg al día). Si una persona quiere equilibrar esto con algo de THC, puede tomar 2,5 mg de CBD junto con cada dosis, lo que básicamente acabaría siendo una proporción de 1:1.
De hecho, este método puede ser una de las mejores formas de determinar la dosis inicial ideal. Aquí es donde una persona puede empezar con un producto de THC, otro de CBD, y descubrir su dosis ideal. Por ejemplo, puede tener una proporción de THC:CBD de 3:1 y otro producto que sea de 1:3, y puede usarlos juntos o en momentos separados para ver qué dosis es mejor para ti, y en qué momento del día. Esto puede ayudarte a encontrar tu dosis ideal con mayor precisión, pero puede llevar tiempo. Algunas condiciones también pueden requerir precisión desde el principio, por lo que este tipo de ensayo y error no es ideal para todos.
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