Cepas autoflorecientes: ¿Un enfoque revolucionario para el cultivo de cannabis?

El cultivo de cannabis siguió siendo popular en muchas partes del mundo, incluidos los Estados Unidos, hasta principios del siglo XX. A principios de siglo, los estados de EE.UU. empezaron a prohibir esta planta. Muchos creen que el cannabis y el cáñamo fueron víctimas de su increíble potencial como material. Se pueden encontrar informes que afirman que podría producir más papel que la madera, pero eso no pareció funcionar para los que tenían intereses creados en la industria maderera y de la leña.

Sean cuales sean las razones para prohibir el cannabis, el hecho de que sea ilegal cultivar marihuana y cáñamo sin licencia es lo que probablemente ha llevado a la introducción de la genética ruderalis, así como a la hibridación de sativas e índicas. Mucha gente recurrió a la ocultación y al cultivo de cannabis en interiores para uso personal. Cultivar en interiores se hizo cada vez más fácil. Una luz y un fertilizante constantes eran suficientes para el éxito. A medida que la tecnología avanzaba, los cultivadores empezaron a tener la opción de personalizar el entorno para adaptarlo a varios tipos de cepas.

Cómo los Ruderalis provocaron el cambio

El Cannabis Ruderalis es una especie única de cannabis. Mientras que algunos la consideran una subespecie de sativa, muchos creen que debería situarse en una categoría aparte. Lo que sabemos de esta planta es que es originaria de Rusia y Europa, donde el entorno frío y poco soleado no permite un largo periodo vegetativo. La Ruderalis también tiene poco tetrahidrocannabinol (THC).

Sin embargo, es posible cruzar Cannabissativa o Cannabis indica con Cannabis ruderalis, y producir una descendencia que sea autofloreciente y tenga un alto contenido de THC. Además, como las plantas ruderalis tienen altos niveles de cannabidiol (CBD), también se puede utilizar como método para aumentar la producción de CBD en una cepa determinada, al tiempo que se elimina la necesidad de un período vegetativo previo a la floración. La Ruderalis también es corta y robusta, y tiene una gran resistencia a los insectos y las enfermedades. El menor tiempo de cultivo y la mayor resistencia hacen que las variedades cruzadas con ruderalis sean un candidato perfecto para los cultivadores caseros y de “guerrilla”, especialmente para aquellos que viven en lugares donde el cannabis es ilegal.

Podría decirse que la ruderalis ha desempeñado un papel esencial para que un mayor número de personas pueda cultivar, y podemos agradecérselo a las semillas autoflorecientes.

¿Qué es la autofloración?

Como su nombre indica, es una característica genética de la planta de cannabis que permite la floración automática. Este rasgo se transmite de una planta a otra a través de su ADN, por lo que sólo algunas cepas y plantas de cannabis tienen esta capacidad. Como el cannabis es diploide, recibe un cromosoma de la madre y el otro del padre. Los genes de ambos lados tienen que ser fotodependientes para que la planta tenga el rasgo de autofloración.

¿Por qué es importante la autofloración?

El beneficio crucial de este proceso es la reducción del ciclo de vida de la planta. El cannabis autofloreciente sólo necesita un máximo de diez semanas para estar preparado para la cosecha. Además, el ciclo de vida no depende de una cantidad específica de luz durante los diferentes períodos de crecimiento. Las cepas autoflorecientes están preparadas para entrar en un ciclo de luz 12:12 de luz oscura desde el principio con el fin de inducir la floración – no es necesario un período vegetativo.

¿Cómo es posible la autofloración?

Varios cultivadores de British Columbia (B.C.) y Ámsterdam trabajaron sin descanso en la combinación de Ruderalis y otras mezclas. Se dedicaron al tema durante décadas para cultivar una planta que tuviera un rasgo autofloreciente sin perder potencia.

Les llevó algun tiempo, pero consiguieron combinar numerosas cepas sativas, índicas e híbridas con ruderalis y enriquecerlas con las características autoflorecientes. Se puede decir que estos cultivadores eran investigadores porque estaban dispuestos a renunciar a sus beneficios para probar este nuevo enfoque en el cultivo de cannabis.

Aunque tuvieron éxito en la creación de híbridos rápidamente, el problema de la potencia se mantuvo. Algunos de los híbridos originales, como Mighty Mite, no tenían una cantidad de THC cercana a la de los híbridos índicos puros. A medida que se fueron sumando más cultivadores, los resultados fueron mejorando con el paso de los años. Hoy en día, la cantidad de THC se acerca al 20%, que es bastante alta, y más que suficiente para aquellos que nunca han probado la marihuana antes, tienen preferencia por las variedades de menor THC, o tienen una baja tolerancia al cannabis.

Híbridos de Ruderalis para fines médicos

Hoy en día, se pueden encontrar híbridos hechos de cannabis Ruderalis utilizados con fines medicinales. Muchos híbridos han logrado mantener la potencia original de la cepa, como Amnesia y White Widow.

Al mismo tiempo, el rasgo de autofloración es importante para el beneficio del cultivador, pero también para tener más control sobre la cosecha. La Ruderalis sólo florece cuando llega a un determinado periodo de su vida, pero una vez que empieza a florecer, el rasgo de autofloración lo hará posible independientemente de las condiciones. Tanto si la mantiene en la luz durante 20 horas, como si pasa la mayor parte del día en la oscuridad, la floración será inminente.

La autofloración es también la razón por la que hoy en día tenemos muchas cepas con diferentes aromas. Los cultivadores se han vuelto ávidos de experimentar, y los usuarios se benefician de tener una amplia selección de cepas entre las que elegir.

Por qué la autofloración es importante para los cultivadores de exterior

En lugar de tener una sola cosecha cada año, ahora pueden beneficiarse de varias cosechas. Eso significa que invertirá la misma cantidad de agua, refrigeración, calefacción e iluminación, pero obtendrá resultados varias veces mejores. También se puede argumentar que así se hace un uso más eficiente de los recursos y, por tanto, menos perjudicial para el medio ambiente en su conjunto.

El hecho de que los cultivadores se animen a pasar al cultivo en exteriores también es beneficioso para los usuarios. El cultivo de cannabis en un entorno natural es la forma más natural de cultivarlo. Naturalmente, es esencial que el cultivador se mantenga alejado de los pesticidas o del exceso de fertilizantes. El mercado está regulado sólo hasta cierto punto, por lo que es necesario investigar antes de elegir el distribuidor preferido. Por supuesto, quienes no deseen cultivar el cannabis por sí mismos, aún tienen la opción de comprarlo en línea.

¿Hay algún aspecto negativo en el cultivo de variedades autoflorecientes?

Aunque las cepas autoflorecientes puedan ser una gran opción para los principiantes, los que tienen poco tiempo o espacio en sus manos, y cuando el entorno no es ideal para que una sativa o una índica se expresen adecuadamente, hay varias desventajas con las cepas autoflorecientes. Entre ellas se encuentran:

• Menor rendimiento, ya que las plantas son más pequeñas.
• Menor contenido de THC, ya que la genética ruderalis puede disminuir la cantidad de THC que la planta puede producir. Sin embargo, a medida que las técnicas de cultivo mejoran, esto está cambiando rápidamente.
• La clonación de plantas autoflorecientes puede dar lugar a un menor rendimiento en la planta clonada, ya que sigue la misma línea de tiempo genética que su madre (es decir, si se clona a partir de una planta que tiene 60 días, todos los clones tendrán también 60 días). Sin embargo, hay quien dice que se pueden conseguir rendimientos similares dejando vegetar una planta autofloreciente clonada y dejándola crecer hasta el 80% o más del tamaño de su madre. Sin embargo, si lo que quiere es tener una madre consistente y clones, entonces las cepas autoflorecientes no son necesariamente para usted. Por otro lado, si quiere probar alguna nueva genética o quiere un cannabis de rápido rendimiento junto a las semillas regulares, entonces las semillas autoflorecientes pueden ser la mejor opción.
• No todos los criadores trabajan con cepas autoflorecientes, lo que significa que la elección del criador de semillas está un poco limitada.

Las variedades regulares, no autoflorecientes, siguen siendo muy útiles para los programas de cría y para garantizar la variación genética de la población de cannabis. Los criadores caseros y otros criadores especializados pueden entonces hacer sus propias versiones autoflorecientes en casa seleccionando la genética autofloreciente y cruzando varias cepas con plantas ruderalis, aumentando la diversidad genética aún más.

El resultado final

En definitiva, no cabe duda de que la autofloración es un rasgo que supuso una auténtica revolución en la industria del cannabis. La aparición del Cannabis ruderalis lo hizo posible, y nadie puede negar que esta variedad se ha hecho tan popular como el Cannabis indica y el Cannabis sativa.

Aunque los resultados ya son buenos, esperamos que sean aún mejores con el paso del tiempo. Podemos ver que el cannabis autofloreciente se utiliza con fines médicos, y por los usuarios recreativos. Si seguimos por este camino, sólo podremos ver mejores resultados en términos de cantidad de cosecha y eficiencia energética.

Biografía del autor:

Jessica es una consultora de la industria del cannabis y de la salud que escribe con frecuencia sobre las últimas tendencias del sector. Lleva mucho tiempo escribiendo. A través de su trabajo, espera influir en el mayor número de personas posible para ayudar a mejorar la salud y estilo de vida de todos. Contacte con ella en jessica@cannabismails.com.

Fuente de la imagen: Autor: Le.Loup.Gris

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