¿Se echan a perder las semillas de marihuana?
Last updated on Oct 7, 2024
Created on Dec 24, 2022
Artículo escrito por
Homegrown Cannabis Co.
¿Se echan a perder las semillas de hierba? Desgraciadamente, sí. Como cualquier materia orgánica, las semillas pierden viabilidad con la edad. Duran unos meses a temperatura ambiente, varios años en lugares frescos y oscuros, y hasta una década si se refrigeran.
¿Debería molestarse en intentar germinar un viejo lote cualquiera de su armario? ¿Cómo se conserva la frescura de las semillas después de comprar un paquete nuevo?
Únase a nosotros para aprender sobre la longevidad de las semillas de marihuana. Hablamos de los signos de envejecimiento, los factores que aceleran su declive y las formas de mantenerlas viables durante más tiempo.
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¿Cuánto duran las semillas de marihuana?
Las semillas de marihuana son organismos vivos que permanecen en estado de reposo hasta que se exponen al calor y la humedad. Cuando se almacenan adecuadamente, siguen siendo capaces de brotar y crecer hasta convertirse en plantas durante mucho tiempo.
Para comprender la longevidad de las semillas, es necesario conocer su morfología.
Las semillas autoflorecientes, regulares y feminizadas consisten en cáscaras duras que protegen el material genético vivo en su interior. En el centro se encuentra el embrión, la fuente genética de una nueva planta. Está rodeado por una reserva nutricional que lo mantiene hasta la germinación.
La cáscara desempeña un papel vital en la conservación de las semillas. Los ambientes adversos deterioran los mecanismos de protección, poniendo en peligro el embrión. Cuando las condiciones son demasiado propicias para la vida, las hormonas se activan y ponen en marcha la germinación, esté o no preparado para ello.
En consecuencia, la vida útil de las semillas depende del entorno. Si se exponen a la luz solar y a las fluctuaciones de calor, se descomponen al cabo de seis meses. Sobreviven un año en un material opaco a temperatura ambiente. La cifra aumenta a 2-3 años cuando el espacio es frío, seco y oscuro.
Puede prolongar aún más la vida útil de las semillas dejándolas en un tarro opaco en el frigorífico. Si el área está por debajo de los 30°F y se las molesta raramente, pueden durar de 5 a 10 años.
Cuanto mejor resguarde las semillas de cannabis, más tiempo permanecerán viables. Veamos qué ocurre cuando la edad las alcanza.
Cómo saber si sus semillas se han echado a perder
La mejor forma de comprobar si sus semillas de marihuana se han echado a perder es germinarlas. Incluso las más viejas pueden reventar, y la edad ya no importa una vez que lo hacen.
Existen varios métodos de germinación, pero ninguno ofrece mejores resultados que la técnica de germinación con toallas de papel. Coloque las semillas entre toallas de papel húmedas y manténgalas en un lugar cálido y oscuro durante 1-5 días. Reaccionan al calor y la humedad produciendo finas raíces pivotantes blancas.
Si las semillas brotan, transpórtelas a macetas y lance la fase de plántula. Si no, aún puede intentar sembrarlas, pero las posibilidades de éxito son menores.
¿Qué ocurre si no quiere perder tiempo en una germinación potencialmente infructuosa o si aún no está listo para sembrar? He aquí cómo puede saber si sus semillas de marihuana siguen siendo viables.
Prueba del olor
Las semillas tienen un ligero olor a madera y tierra cuando están sanas. Si huelen a moho, probablemente se han echado a perder debido a un exceso de humedad.
La prueba del remojo
Ponga las semillas en un vaso transparente con agua y déjelas reposar durante 15 minutos. Los ejemplares viables son densos y se hunden hasta el fondo. Las que flotan en la superficie han perdido sus reservas nutricionales o embriones.
La prueba del tacto
Las semillas sanas se sienten relativamente blandas entre los dedos. Cuando envejecen, la cáscara se endurece y pierde su elasticidad. En casos extremos, puede incluso astillarse bajo una ligera presión.
Cuestiones visuales
Las semillas no tienen un aspecto muy uniforme: incluso las de la misma cepa tienen formas y tamaños diversos. Aún así, muestran signos visuales de envejecimiento y deterioro:
- Cambios de color: Las semillas de color marrón oscuro, negro y gris son sanas y maduras. Las blancas y verdes son demasiado jóvenes; las de color marrón pálido son demasiado viejas. También debería ver un patrón rayado o moteado alrededor de la cáscara.
- Pérdida de brillo: Las semillas de marihuana viables tienen recubrimientos cerosos sobre sus cáscaras, que brillan ligeramente bajo la luz. Este brillo aceitoso sugiere que pueden retener la humedad. Las que parecen apagadas y sin vida han perdido esa capacidad.
- Forma plana: Las semillas de calidad son redondas, gordas y muy propensas a brotar. Si parecen pequeñas y desinfladas, ya han perdido cierta capacidad para retener la humedad.
- Grietas y agujeros: La cáscara exterior protege al vulnerable embrión de cannabis de los agentes patógenos y de las condiciones climáticas adversas. Cuando se agrieta, las bacterias y otras formas de vida nocivas pueden entrar en la semilla. El aire puede hacer que las células vivas se sequen y mueran.
5 factores que hacen que las semillas se estropeen
Cuando las semillas de hierba se echan a perder, o bien están demasiado cerca de brotar o se secan tanto que mueren. Ninguna de las dos opciones es una buena noticia, pero puede conservarlas vigilando los siguientes factores de peligro.
1. Extracción deficiente
Cuando los cultivadores comerciales adquieren semillas de plantas de cannabis, deben trasladarlas inmediatamente al almacén. De lo contrario, se deterioran con bastante rapidez y usted no consigue cultivar la hierba de sus sueños.
Elija a su vendedor con cuidado y compre en bancos de semillas de confianza como nuestro socio Homegrown Cannabis Co. Sus impecables prácticas de almacenamiento garantizan que sus productos estén frescos y listos para germinar cuando quiera empezar a cultivar.
2. Luz
La luz no ayuda al almacenamiento de las semillas. Al contrario, puede reducir significativamente su vida útil. Además de alterar las semillas, el sol y los focos calientes pueden secar las reservas de nutrientes. Como resultado, el espécimen es más débil y más difícil de germinar.
3. Humedad elevada
La humedad elevada hace que las semillas se pudran desde el interior. La humedad moderada también puede desencadenar el proceso de brotación antes de tiempo; no se puede salvar una raíz pivotante una vez que se seca y muere.
4. Temperaturas extremas
El calor excesivo favorece la germinación. Si se mantienen en espacios abrasadores, sus semillas pueden estallar y secarse inmediatamente. El calor moderado también puede causar problemas.
Temperaturas de más de 60°F pueden iniciar procesos químicos relacionados con la germinación. La semilla no estallará sin agua, pero agota su almacenamiento de nutrientes y se vuelve inviable.
El frío excesivo también es una mala noticia. Congelar las semillas es posible y a veces beneficioso, pero sólo si la temperatura desciende rápidamente. Un enfriamiento lento puede matar el embrión.
5. Exposición al aire
El aire fresco reduce la calidad de las semillas de cannabis porque desencadena procesos relacionados con la germinación. Los espacios ventilados mantienen el periodo de hibernación y preservan la viabilidad para más adelante.
Cómo mantener sanas sus semillas
Para empezar, compre en un banco de semillas reputado. Una genética estelar y unos procesos de extracción meticulosos le preparan para el éxito. El resto corre de su cuenta.
Una vez que compre semillas de primera calidad, coloque las que no vaya a sembrar inmediatamente en condiciones ideales. De ese modo, mantendrá un alto índice de germinación y obtendrá plantas de cannabis sanas incluso años después de su compra.
Saber qué semillas conservar puede aumentar su tasa de éxito. Coja una lupa e inspeccione su lote en busca de grietas. Las que tengan la cubierta exterior dañada no deberían almacenarse, ya que el volátil material genético de su interior ya está en peligro. Guarde sólo las que no presenten signos de daños físicos.
Estos cuatro factores conforman el entorno óptimo de almacenamiento de semillas:
Recipientes herméticos
Si no va a cultivar marihuana inmediatamente, retrase la apertura del envase original el mayor tiempo posible. Cada alteración quita días o meses a la vida útil de las semillas.
Una vez que abra el paquete, coloque inmediatamente las semillas de marihuana en recipientes herméticos. Los tarros Mason con tapas a presión o cierres de goma gruesa son perfectos para el almacenamiento a largo plazo.
Opte por recipientes de cristal o cerámica en lugar de plástico. Los recipientes de plástico retienen el calor y podrían hacer que “sudaran”, drenando la humedad de las semillas.
Las bolsas Ziplock son otra solución ingeniosa. Se les quita todo el aire, creando un recipiente sellado al vacío. Asegúrese de envolverlas en plástico oscuro para proteger las semillas de la luz del frigorífico.
Consejo: Llávese las manos antes de manipular las semillas para evitar transferirles cualquier bacteria.
Exposición mínima a la luz
Evitar la exposición a la luz es otro factor importante a la hora de almacenar las semillas.
Bloquee toda la luz empleando tarros opacos o colocando las transparentes en bolsas de papel de estraza. Elija un lugar recogido o a la sombra, como la parte trasera de su nevera o un armario que se abra con poca frecuencia.
Temperatura estable
Las fluctuaciones de temperatura pueden deteriorar las buenas semillas, por lo que la estabilidad es su principal objetivo. Coloque los tarros en un armario que abra con poca frecuencia o en una sección trasera oculta de su frigorífico. También puede adquirir un pequeño congelador de camping para su paquete con el fin de minimizar las molestias.
Si opta por el almacenamiento a corto plazo, evite guardar las semillas en un lugar a más de 70°F. Si planea conservarlas durante años, 30-40°F es lo ideal.
También puede congelar las semillas, ya que las temperaturas más bajas implican un deterioro más lento. En este caso, asegúrese de que estén secas al 100% dejándolas en un lugar con brisa durante unas horas. Descongelarlas es complicado si hay puntos helados en las cáscaras.
Humedad baja
La humedad hace que las semillas broten, y el aire seco las conserva. Procure una humedad relativa del 20-30% para evitar la germinación y la actividad de las plagas en el tarro. Curiosamente, los niveles inferiores al 10% reducen algo las posibilidades de germinación.
Consejo: Si vive en una zona tropical, coloque una bolsita de sílice en el tarro de albañil con las semillas. Estas perlas absorben el exceso de humedad y reducen los niveles de humedad dentro de su recipiente.
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Preguntas frecuentes
¿Se pueden guardar las semillas que se han echado a perder?
Sus semillas viejas no volverán a su estado ideal, pero aún podrían germinar. He aquí varias formas de aumentar sus posibilidades:
- Remoje previamente en agua carbonatada enriquecida: Añada potenciador de la germinación, ácido fúlvico o peróxido de hidrógeno en un vaso de agua con gas tibia. Deje las semillas en remojo durante 12 horas.
- Marque la superficie: A medida que las semillas envejecen, su cáscara exterior se vuelve más gruesa y dura. Rásquelas suavemente con papel de lija para que el calor y la humedad se infiltren en el interior.
- Elimine la cresta: La parte elevada de la semilla también se endurece con el tiempo. Retírela con una cuchilla afilada para favorecer la germinación.
- Abra la semilla: Haga un corte poco profundo en la cáscara para ayudarla a brotar. Tenga cuidado de no dañar el embrión.
Algunas semillas no germinarán a pesar de sus mejores esfuerzos. Aún así, estas técnicas podrían ayudarle a salvar al menos varios ejemplares de un lote viejo.