¿La marihuana provoca problemas de ira?
Artículo escrito por
Dipak HemrajResponsable de Investigación y Educación
Es posible que la marihuana pueda causar problemas de ira cuando se consume en dosis elevadas o durante largos periodos de tiempo.
Aunque la marihuana se asocia a menudo con un efecto calmante y suavizante, algunos informes sugieren que puede provocar un aumento del comportamiento violento en algunos consumidores. Las interacciones exactas no se conocen bien, pero los investigadores especulan que puede deberse a varias razones, como el síndrome de abstinencia o el consumo crónico de marihuana a una edad temprana.
También es importante tener en cuenta los componentes del propio cannabis, ya que las cepas con mayor contenido de tetrahidrocannabinol (THC) se asocian a un mayor riesgo de provocar paranoia o ansiedad, a menudo asociadas a la agresividad.
Este artículo aborda la posible relación entre la marihuana y la ira, por qué se produce y qué hacer al respecto.
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Cómo afecta la marihuana a su estado de ánimo
La marihuana contiene un cannabinoide conocido como tetrahidrocannabinol (THC). Junto con otros cannabinoides, este compuesto interactúa con nuestro sistema endocannabinoide (SEC), una red de transmisores que desempeñan diversas funciones en nuestro cuerpo, incluida la regulación de nuestro estado de ánimo.
Dentro de nuestro SEC, hay muchos receptores repartidos por todo el cuerpo que responden a estos cannabinoides. Más concretamente, se cree que los receptores CB1 tienen un papel en la regulación de la ansiedad y los estados de ánimo.
Los receptores CB1 se encuentran en altas densidades dentro de las regiones del cerebro – como la amígdala, la corteza y el hipocampo – y ayudan a regular sus emociones. Dentro del cuerpo, el THC actúa como agonista del receptor CB1, haciendo que se active.
Como el THC se une bien a los receptores CB1, crea efectos psicoactivos como cambios en el estado de ánimo y en el control motor. La ciencia más allá de este punto es muy debatida ya que los efectos del consumo de cannabis difieren significativamente de una persona a otra.
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Sentirse “colocado”
Los consumidores suelen decir que se sienten “colocados” cuando consumen marihuana. El THC estimula las áreas de placer en el cerebro que responden a cosas como el sexo y la comida. Como respuesta, se libera dopamina, comúnmente conocida como nuestra sustancia química del “sentirse bien”, que le hace sentirse relajado y feliz. Esto se observa a menudo en las dosis más bajas, mientras que las dosis más altas pueden tener el efecto contrario.
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Efectos sobre el pensamiento
Junto con la sensación de euforia, la marihuana puede provocar una distorsión del pensamiento, una agudización de los sentidos, un aumento de los comportamientos de riesgo y un deterioro de las habilidades motoras. Esto depende de la potencia del cannabis, de su nivel de tolerancia y de su método de consumo.
Aunque muchas personas, incluido Steve Jobs, sostienen que el cannabis ayuda a la creatividad, estudios recientes demuestran que puede perjudicar nuestro pensamiento divergente en dosis elevadas.
Un estudio que comparaba la creatividad en grupos de baja potencia, alta potencia y placebo, descubrió que la marihuana de baja potencia no afectaba a la creatividad de los participantes. Por el contrario, los participantes en el grupo de alta potencia tenían un rendimiento deteriorado. Esto sugiere que el cannabis puede afectar negativamente a nuestra creatividad en dosis altas, pero se necesita más investigación en esta área para estar seguros.
Condiciones de salud mental
El cannabis en dosis bajas puede reducir los niveles de ansiedad. Por esta razón, muchas personas con trastornos de ansiedad afirman que utilizan la marihuana para aliviar sus síntomas. Sin embargo, a medida que las dosis aumentan, los estudios sugieren que el cannabis puede elevar los niveles de ansiedad, lo que puede ser devastador para los individuos que ya están controlando un trastorno de ansiedad.
Dados sus efectos psicoactivos, el THC puede tener cierta relación con la aparición de trastornos psicóticos y otros problemas de salud mental. Los resultados de un estudio multicéntrico de casos y controles descubrieron que las probabilidades de desarrollar un trastorno psicótico eran 3,2 veces mayores en los participantes que eran consumidores diarios en comparación con las personas que nunca habían consumido marihuana. Esto puede indicar que los consumidores crónicos tienen un mayor riesgo de desarrollar una mala salud mental, pero se necesita más investigación.
Otra revisión descubrió que los individuos con una enfermedad mental eran más propensos a automedicarse con cannabis, lo que polariza aún más los argumentos a favor y en contra de su uso.
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¿Puede la marihuana hacer que se enfade?
Basándonos en lo que sabemos, la mejor respuesta a si el consumo de cannabis provoca problemas de ira es “quizás y quizás no”. Como se ha comentado, el consumo de marihuana puede afectar al estado de ánimo de varias maneras. Normalmente, el cannabis se asocia con la euforia, pero algunas personas pueden experimentar efectos adversos como la ansiedad y la paranoia, especialmente cuando consumen cannabis en dosis elevadas.
Otros factores sobre los que hay que seguir investigando son si la marihuana desempeña un papel en la psicosis y qué papel desempeña el consumo crónico en los sentimientos de ira o irritabilidad.
Psicosis
El cannabis está implicado en aproximadamente el 50% de los casos de psicosis, psicosis esquizofreniforme y esquizofrenia. Asimismo, según el Informe de Investigación sobre el Cannabis del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas, los individuos que fuman diariamente marihuana de alta potencia pueden tener cinco veces más probabilidades de desarrollar psicosis que sus homólogos no fumadores. Se ha demostrado que la edad de inicio del consumo, la potencia y la variabilidad genética contribuyen a este efecto.
Pero es importante tener en cuenta que el factor causal a menudo no está claro, ya que los estudios han encontrado que los adolescentes con una predisposición a desarrollar un trastorno psicótico pueden ser más propensos a consumir cannabis, posiblemente como una forma de automedicación.
Un informe publicado en 2017 sugirió que el comportamiento violento de los consumidores de cannabis puede estar asociado a la aparición de psicosis, así como a los delirios de que el individuo está siendo atacado.
El informe destaca un caso de un individuo con psicosis inducida por la marihuana que creía que matar a los pacientes de un centro asistencial beneficiaría a la sociedad. Aunque son anecdóticos, lo que significa que la información no puede generalizarse para describir a una población en general, estos hallazgos sugieren que es necesario investigar más sobre el posible vínculo entre la marihuana y la psicosis.
Consumo crónico
En comparación con las actitudes históricas, hoy en día son menos los adolescentes que creen que el consumo regular de cannabis es perjudicial, y el consumo diario aumentó del 1,5% a casi el 4% entre los ciudadanos estadounidenses entre 2002 y 2019, según un informe publicado en 2021.
Aunque es especulativo, la aparición de trastornos psiquiátricos, como el trastorno bipolar y la esquizofrenia, tras el consumo crónico de marihuana puede explicar síntomas como la agresividad y la irritabilidad en casos poco frecuentes de consumidores de marihuana.
Los estudios demuestran que el consumo crónico de marihuana puede aumentar el riesgo de sufrir trastornos psiquiátricos. Aunque este escenario se ha dado en muchos casos raros, se necesita más investigación para determinar si se trata de una relación causa-efecto.
Abstinencia de la marihuana
Conocido comúnmente como “síndrome de abstinencia del cannabis”, el síndrome de abstinencia de la marihuana lo experimentan aproximadamente el 47% de los consumidores crónicos que intentan dejarlo. La gravedad y duración reales de los síntomas están en parte relacionadas con la frecuencia y la cantidad de marihuana que la persona consume. Los consumidores crónicos con dosis potentes o de uso frecuente suelen tener más dificultades con los síntomas de abstinencia.
Los factores asociados a un mayor riesgo de desarrollar el síndrome de abstinencia del cannabis incluyen el entorno clínico y el consumo simultáneo de tabaco u otras sustancias. Los estudios sugieren que otros factores como el sexo, la genética y el entorno también influyen en la gravedad de la abstinencia.
Los efectos secundarios más comunes de la abstinencia son los siguientes:
- Sentimientos de irritabilidad, ira o agresividad
- Sensaciones de extremo nerviosismo o ansiedad
- Alteraciones del sueño
- Disminución del apetito
- Aparición de sentimientos depresivos
- Síntomas físicos como fiebre, escalofríos, sudoración, dolor de cabeza y dolor abdominal
En el caso de los consumidores crónicos que experimentan la abstinencia de la marihuana, los síntomas aparecen una semana después de dejarla y alcanzan su punto máximo en 10 días. Los síntomas disminuyen lentamente su gravedad en un plazo de 10 a 20 días, pero se resuelven rápidamente si el individuo comienza a fumar de nuevo.
La abstinencia de cualquier sustancia que altere la mente, incluida la marihuana, siempre deja la posibilidad de que los individuos sean más propensos a los accidentes, muestren un juicio pobre e incluso desarrollen pensamientos suicidas debido a la depresión y la angustia que puede producirse durante el periodo de abstinencia. Por lo tanto, los consumidores crónicos de marihuana que quieran dejar de consumirla deben consultar siempre a su médico o hacerlo bajo la supervisión de un profesional de la salud mental.
Las mejores cepas de cannabis para controlar la ira
Parte del atractivo del cannabis son sus efectos suavizantes y calmantes, aunque esto difiere según la cepa. Algunas cepas tienen efectos más calmantes y pueden utilizarse para controlar los problemas de ira, mientras que otras pueden agravar los síntomas negativos, dependiendo de la dosis. Estas son algunas de las mejores cepas para calmar la ira:
Cannatonic
La Cannatonic es una cepa de cannabis rica en CBD que se obtiene del cruce entre la MK Ultra y la G13 Haze. La Cannatonic es una de las cepas que inició la revolución del CBD. La Cannatonic puede producir algo de THC (hasta un 6%) pero mucho más de CBD, midiendo entre un 6% y un 18%.
Esto significa que Cannatonic puede tener una proporción de CBD:THC de entre 1:1 y 3:1. Esto puede hacer que Cannatonic sea útil para controlar la ansiedad y la depresión, reduciendo las posibilidades de un ataque de pánico inducido por el THC.
Blue Dream
Blue Dream contiene un nivel moderado de THC y un amplio perfil de terpenos. Tiene efectos bien equilibrados, a menudo se describe como un cultivo sabroso cuando se inhala, y se ha destacado por su capacidad para reducir el estrés. Todos estos factores significan que Blue Dream podría ser útil para reducir la irritabilidad.
Harlequin
Harlequin contiene una proporción de CBD:THC de aproximadamente 5:2, y ambos cannabinoides pueden ayudar a uno a relajarse, reduciendo potencialmente el estrés y la ira. La proporción única de CBD:THC y la presencia de terpenos antiinflamatorios como el pineno, el beta-cariofileno y el mirceno pueden ayudar a aliviar el dolor crónico, contribuyendo así a aliviar la irritabilidad.
Blackberry Kush (BBK)
La Blackberry Kush es un cultivar híbrido producido al cruzar la Afghani con la Blackberry. La BBK es conocida por su perfil de sabor dulce, a bayas, a hachís y a pimienta, y por sus efectos relajantes, inductores del apetito y somnolientos. Los niveles de THC tienden a mantenerse por debajo del 20%, lo que hace que la BBK sea una gran opción para controlar el dolor crónico, el estrés y el insomnio, que pueden provocar irritabilidad.
Lemon Pie
La Lemon Pie es un cultivo creado por Leafs by Snoop. Tiene un sabor picante, floral, cítrico y a gasóleo y contiene hasta un 22% de THC. El limoneno es un terpeno prominente en esta variedad de cannabis, al igual que el mirceno. La Lemon Pie tiene efectos edificantes y relajantes que podrían hacerla útil para controlar el estrés, la depresión, la fatiga y el TEPT.
Consulte nuestro artículo sobre las mejores cepas para la irritabilidad para saber más sobre los tipos de cannabis que pueden ayudar a controlar la irritabilidad y la ira. Tenga en cuenta que no hay pruebas científicas que sugieran que las cepas de cannabis mencionados en este o cualquier otro artículo puedan ayudar a reducir la ira o la irritabilidad. Es necesario realizar más investigaciones para averiguarlo.
El resultado final
Aunque la marihuana es cada vez más popular en el ámbito clínico, algunos estudios indican que puede afectar a nuestra respuesta de ira. En su mayor parte, los efectos negativos de la marihuana suelen estar asociados a dosis más altas, al uso crónico y a la abstinencia.
Otros factores como la edad de inicio de los consumidores, el sexo y los factores ambientales también pueden influir. Sin embargo, el cannabis puede ayudar a algunas personas a mitigar la ansiedad, la depresión, el estrés y el trastorno explosivo intermitente cuando se dosifica adecuadamente.
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